La acumulación de grasa subcutánea o celulitis, que se presenta en forma de nódulos y hoyuelos, suele aparecer en diferentes zonas del cuerpo como caderas, muslos, nalgas y, sobre todo, en el abdomen. Esta afección de la dermis, conocida también como “piel de naranja”, impacta a la gran mayoría de las mujeres. La Dra. Gilda Pérez, de nuestro Centro de Medicina Estética, nos brinda valiosa información sobre este tema.

¿Cómo pueden ayudar los masajes linfáticos a combatir la celulitis?

La terapia de masajes linfáticos es una técnica en la que mediante ligeras presiones se contribuye a bombear la circulación linfática de manera adecuada. Al trabajar sobre el sistema circulatorio, permite una mejor movilización de los líquidos del organismo, eliminando así toxinas u otras sustancias del cuerpo.

Beneficios de los masajes linfáticos

Los masajes linfáticos aportan diferentes beneficios, tales como:

• Reabsorción del edema
• Refuerza el sistema inmune
• Mejora la circulación sanguínea y linfática
• Reduce la inflamación
• Disminuye la flacidez y la celulitis
• Ayuda a eliminar toxinas
• Oxigena los tejidos
• Previene la fibrosis después de alguna cirugía plástica

 
Recomendaciones para evitar la celulitis

La celulitis o piel de naranja aparece en hombres y mujeres sin importar su edad o estilo de vida. Sin embargo, para evitar esta afección es necesario seguir algunas recomendaciones:

• Mantener una dieta sana (evitando la excesiva ingesta de grasas y carbohidratos)
• Disminuir el consumo de cafeína y sal
• Realizar ejercicios físicos de tonificación
• Mantener una correcta hidratación de la piel (tomar 2 litros de agua al día)
• Evitar variaciones bruscas de peso

 
Recuerda:

Este tipo de masajes son de gran ayuda para mejorar visiblemente la salud de tu piel. Es importante que pases por una evaluación previa para que un especialista determine el tipo de celulitis que presentas y pueda indicarte cuántas sesiones se requieren para tratar con éxito esta afección.

Dra. Gilda Pérez
Centro de Medicina Estética de la Clínica Ricardo Palma